Titular del sector aseguró que los materiales educativos serán retirados y revisados de manera exhaustiva.
Pese a que la educación es uno de los procesos más importante en una sociedad, los niños de colegios estatales han estado recibiendo libros con errores matemáticos y de comprensión lectora, desde el 2013. Según una denuncia, el Ministerio de Educación (Minedu) autorizó la entrega de los textos a los menores, sin haber supervisado adecuadamente.
Un grupo de especialistas consultados por el programa “Panorama” halló errores en los planteamientos y soluciones de ejercicios matemáticos, así como resultados que no se pueden conseguir porque los datos ofrecidos son erróneos e incoherentes.
Ángel Sanchez, profesor de la selección peruana de matemáticas, detalló que, por ejemplo, en un ejercicio donde se resta 1.802 de 2.054, el resultado que aparece es 1252, cuando debe ser 252. En otro libro se encontró que la suma de 2.467, 1.378 y 501 da un total de 3.346, cuando la respuesta correcta es 4.346.
Lamentablemente, no solo se hallaron errores en ejercicios matemáticos, sino también en Comprensión Lectora y Comunicación.
Es el caso de un planteamiento donde los productos son tamales y en las opciones de respuestas solo aparecen alfajores. O un ejemplo brindado por el profesor Oswaldo Carlos Quispe, del Cusco, en el que se afirma que el masato es una bebida fermentada de plátano, cuando es popularmente conocido que es de yuca.
Sin embargo, eso no es todo, pues el Ministerio de Educación no habría repartido todos los textos, lo que habría obligado a los profesores a tener que sacar fotocopias. Así lo denunció Orlando Sevillano, director del colegio San Artesano, quien detalló que entre un 10 % y 15% de escolares de su plantel no han recibido el material educativo.
Minedu responde
Ante este indignante hecho, el titular de Educación, Idel Vexler, en una comunicación telefónica con el programa de noticias, expresó su “molestia e indignación” y aseguró que los textos serán retirados y posteriormente revisados de manera exhaustiva. También explicó que los libros tienen una vigencia de 2 a 4 años.
Por su parte, el viceministro de Gestión pedagógica, Guillermo Molinari, afirmó que, pese a que haya errores, el docente es quien debe “enseñar adecuadamente y correctamente al niño”. El funcionario será quien investigue las responsabilidades en este caso.
Fuente: La República.
