
El presidente del Centro Nacional de Planeamiento Estratégico (Ceplan),
Javier Abugattás, destacó la necesidad de mejorar la recaudación tributaria a
favor de la educación.
Así lo
resaltó en el foro "Igualdad de oportunidades, ¿sin tributar? Más inversión
para la educación pública", realizado en la sede de la Sociedad Nacional
de Industrias (SNI), con el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas
para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Abugattás
subrayó el compromiso del Perú para alinear políticas fiscales con los objetivos de desarrollo
integrados a la Agenda 2030.
Para
ello, indicó que se debe hacer un enorme trabajo de reconocimiento de
la realidad en cada zona.
En el
encuentro, Abugattás Fatule informó el proceso participativo para construir la
visión concertada de futuro de país al 2030, detallando la propuesta de
imagen elaborada por Ceplan: un Perú con mayor potencial, sostenible, próspero,
pacífico y unido.
El evento
tuvo como panelistas a Magaly Robalino (Unesco Perú), Walter Twanama (Foro
Educativo), Hugo Ñopo (Grade) y Adrián Falco, secretario técnico de la Red de Justicia
Tributaria de América Latina y El Caribe (RJFLAC).
En el
foro se presentaron avances de investigaciones sobre temas como presupuesto
público, tributación y el derecho a la educación, en el marco
del compromiso del Estado con la Agenda Educación 2030 y, en particular sobre
N° 4 Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS).
Metas
realistas
“Hoy
gastamos 3.7% del Producto Bruto Interno (PBI) en la educación, movernos
del 3.7% al 6% es imposible en un mediano plazo. Debemos saber a dónde queremos
llegar y por qué es que queremos llegar a tal o cual meta”,
afirmó.
En este contexto, el
investigador expresó que se requiere más inversión y mejorar la formación de
capital humano.
Refirió que el
Perú destina al año 1,100 dólares por estudiante en la educación básica regular,
mientras que Colombia presupuesta 2,200 y Chile, 3,500 por alumno.
“El
atraso en la educación, también genera otro círculo vicioso de bajos salarios,
escasas habilidades y poca capacidad para enseñar. Hay que quebrar ese círculo
vicioso”, dijo.
En ese sentido, enfatizó
que, para romper ese círculo negativo, se necesitan dos cosas, mejorar
los salarios y las condiciones laborales.
“Pero esto
tiene que venir de la mano con una exigencia más alta, estándares más elevados
para los profesores”, subrayó.
Monitoreo de avances
Por su parte, la
representante de la Unesco Magaly Robalino, sostuvo que los países de la región
tienen el desafío de adaptar o interconectar de forma integral las agendas de
educación al resto de áreas.
En ese sentido, resaltó
tres principios importantes que se deben resaltar: Universalidad, Integralidad
y que nadie se quede atrás.
“Se
debe fortalecer los sistemas y espacios de recopilación de datos y monitoreo de
las metas a nivel regional y nacional. Además de formar
alianzas entre centros de formación para generar intercambio de conocimientos
dentro del país, la región y a nivel global”, puntualizó.