¿Sabías que los mapas mentales
ayudan a comprender mejor los conceptos? También en la enseñanza de idiomas,
como explica Isabel Montes García, jefa del Departamento de Francés de la
Escuela Oficial de Idiomas Sierra Morena de La Carolina (Jaén).
En el Departamento de Francés de la Escuela
Oficial de Idiomas Sierra Morena (La Carolina, Jaén) llevamos unos ocho cursos
usando los mapas mentales con alumnado adolescente y adulto. De hecho, son una
de las primeras herramientas -tanto digitales como analógicas- que se
incorporan al PLE de nuestros estudiantes, pues son esenciales para
adquirir estrategias de aprendizaje asociadas a tareas de producción,
comprensión y mediación, aprovechando de paso las posibilidades que ofrece
el Visual Thinking o pensamiento visual. En la práctica, pueden
emplearse para trabajar en todo tipo de niveles, tal y como demuestran los
proyectos con los que hemos trabajado.
Como
presentación
‘Moi-Je’, por ejemplo, es una actividad que hacemos
en las primeras sesiones con los grupos en los que hay estudiantes nuevos. Se
trata de hacer un mapa mental en una cartulina o pizarra blanca con datos sobre
cada miembro el grupo: se les anima a usar colores y formas, imágenes
recortadas de revistas y folletos, dibujos o flechas… En función del
nivel, también se les pueden mostrar ejemplos (de los miles que podemos
encontrar en Pinterest, por ejemplo). En definitiva, se trata de activar el
léxico de la esfera personal, de los gustos, las preferencias y rasgos de la
personalidad, y darse a conocer al resto de manera visual.
Estos pósteres se exponen en el
aula y a lo largo del primer trimestre volvemos a ellos para añadir o completar información conforme se incorpora nuevo léxico y capacidad
de expresar conceptos nuevos. Una imagen comparativa del mapa mental antes y al
cabo de varias semanas da también pie para autoevaluar el aprendizaje e
ilustrar el portfolio del alumnado.
En clases a partir del nivel B1, por otro lado, realizamos la actividad
titulada ‘Greffe de cerveaux’ o ‘Transplante de cerebros’. En ella, los
discentes (pueden hacerlo tanto en solitario como en equipo) deben desarrollar un tema a partir del mapa mental
elaborado por los demás. Al terminar, comentan los diferentes
textos en voz alta, trabajando así la expresión oral en una actividad que les
permite matizar sus ideas originales y opinar sobre cómo las han reflejado sus
compañeros y compañeras. Intentamos siempre reforzar la reflexión sobre el
aprendizaje frente al resultado.
Creando debate
También llevamos a cabo una ‘Carrera de mapas mentales’. Para ello,
damos una frase desencadenante y deben desarrollar, en un tiempo dado, un mapa mental de argumentos a favor o en contra.
Insistimos en el uso el color y de subrayados e iconos para reflejar
connotaciones positivas y negativas, grados de importancia, jerarquías de
ideas… Al final comparamos los ejercicios entregados y elaboramos un mapa
conjunto con lo mejor de cada uno. Finalmente, cada estudiante elabora su
propio discurso, oral o escrito, que resuma las ideas recogidas.
También hemos diseñado una
actividad (para A2-B1 en adelante) para trabajar la memoria a corto plazo y
reflexionar sobre cómo tomar notas ayuda a recordar mejor la materia. En primer
lugar, se escucha el texto sobre el que hay que trabajar (que se puede seguir a
través de la lectura para asegurar mejor la comprensión del mismo). A
continuación, el alumnado debe elaborar un mapa mental, en solitario o por equipos,
con las principales ideas que han retenido en un primer
momento. Se vuelve a escuchar la narración inicial dos veces más para poder
detallar al máximo posible el mapa. Después, tendrán un tiempo para completarlo
empleando colores, tamaños y letras diferentes que resalten conceptos clave,
etc. Por último, deberán redactar un resumen a partir de este esquema. Se puede
hacer una variación de esta actividad tomando notas de un texto en lengua
término (LT) y resumirlo en lengua materna o viceversa.
Beneficios de su uso
En nuestro
caso, nos servimos de la herramienta gratuita Mind42, que permite exportar
el mapa a un documento
rtf, de manera que los epígrafes, subepígrafes y párrafos que
aparecen a partir de los nodos y notas de texto del mapa son ya una base muy
fiable para construir un texto coherente.
En todas estas
actividades que implican expresión oral o escrita, o interacción, los mapas
mentales o conceptuales permiten reflejar de manera más fiel el pensamiento de
cada cual, favoreciendo la reflexión
y la autoevaluación según los diferentes estilos de
aprendizaje. Por eso se consideran como una etapa más en las tareas de
producción o coproducción oral y escrita, y también de mediación y se evalúan
dentro de las mismas.
Por otro lado,
aplicamos los mapas al aprendizaje de léxico y contenidos socioculturales. Como
ejemplo de tarea de este tipo, aportamos estos mapas mentales
realizados por alumnado de Nivel Intermedio de Francés sobre la
canción francófona reivindicativa o con compromiso social. En el transcurso de
la tarea, aprenden a afinar búsquedas en Internet mediante palabras clave y
desarrollan sus competencias digitales como parte de las estrategias de
aprendizaje autónomo.
También entra
en juego la mediación lingüística, sin duda la gran novedad en el currículo de
las enseñanzas de idiomas de régimen especial para el curso 2018-2019, cuando
el alumnado es invitado a comparar
cantantes y canciones similares pertenecientes a varios contextos culturales.
Opcionalmente, podemos practicar la producción oral y/o escrita, invitando a
los estudiantes a que presenten su selección de canciones, un resumen de las
letras o mensajes y sus opiniones sobre las mismas.