Aunque a menudo relacionemos la creatividad con el Arte, hay muchas otras formas de desarrollar esta ‘soft skill’ en clase. Elba Pedrosa, autora del libro ‘Despertando la creatividad’ propone cinco ideas para trabajarla en clase.
La creatividad es una de esas habilidades denominadas ‘soft skills’ más valoradas y demandadas tanto en los entornos laborales actuales como en el ámbito de la educación. Sin embargo, etiquetarla como una habilidad blanda no la beneficia en absoluto; en realidad es una herramienta muy potente, central y transversal, que pone en valor al individuo. Es imprescindible su desarrollo desde la infancia, para consolidar este proceso cognitivo durante toda la vida. La creatividad aporta mayor bienestar psicológico y físico a las personas, y debe quedar ya fuera de toda duda que se trata de una moda pasajera.
También es necesario comprender que no podemos restringir su trabajo en el aula a actividades de artes plásticas. Sin duda es una conexión acertada y muy valiosa, pero su aplicación no puede condicionarse exclusivamente a la ejecución de proyectos artísticos. Arte y Ciencia comparten metodología, la científica de resolución de problemas; sin embargo la finalidad de ambas disciplinas no es la misma, y es interesante buscar las vías adecuadas para incorporar la metodología de experimentación resolutiva y el pensamiento de diseño. Y el objetivo general de estas acciones ha de estar focalizado en favorecer el conocimiento profundo y construir un aprendizaje activo, para así enriquecer al alumnado.
Se les propone 5 ideas:
Pon el foco en las personas
Si tenemos en cuenta que ‘todo
empieza y termina por las personas’ y les hacemos partícipes de esta idea, les
estaremos orientando hacia la observación y escucha activa de sus necesidades,
propias y ajenas, emociones, sensaciones. Estaremos ayudándoles a adquirir
distintas perspectivas, una visión nueva desde otro punto de vista y, por lo
tanto, orientamos hacia la búsqueda de un replanteamiento de las situaciones.
Trabajar en el aula con esta perspectiva favorece también la empatía y la
comunicación.
Provoca en la exposición
Despertar la curiosidad,
transgredir y evitar el aburrimiento son maneras eficaces para llamar la
atención y conseguir una mayor concentración. Al igual que los artistas
recurrimos a diferentes vías para divertir y provocar a los espectadores,
haciéndolos salir de la rutina, en las aulas también podemos hacerlo. Un modo
sencillo y con grandes resultados es conectar los contenidos con sus propios
intereses. ¿Ya has indagado cuáles son?
Fomenta la autonomía
Conseguir su implicación máxima
y la responsabilidad por su propio aprendizaje, favorecerá también su
autonomía. Es necesario para ello conseguir establecer una conexión entre cada
persona y su sentido individual del conocimiento. Descubrir las inquietudes de
manera individualizada en cada alumno es necesario para encontrar este
motivador intrínseco.
Trabaja la imaginación
Ver para creer. Muchas veces si
no visualizamos algo en nuestra mente jamás lo llevaremos a la práctica, ni
tampoco creeremos en ello. Favorecer la imaginación aproximará la mente a la
realidad. Pon en práctica visualizaciones creativas y fomenta el compartir
experiencias.
Abre y Cierra
Pero vuelve a abrir. Es
importante que tratemos de incorporar una combinación del pensamiento
divergente y convergente también en nuestros planteamientos y exposiciones.
Condicionar de manera permanente y exclusiva las búsquedas de soluciones, o las
evaluaciones del alumno a una única respuesta válida limita los procesos
cognitivos desde la infancia.
Fuente: Educación3.0