Dice así: “El país escandinavo está decidido a
acabar con las clases de física, química, matemáticas, geografía o historia a
partir de los 16 años de la forma en la que están concebidas en el pensamiento
tradicional (y en el B.I.). Marjo Kyllonen, la mayor autoridad educativa en
Helsinki dice: “Se está enseñando con un método que era efectivo a principios
del siglo XX, pero ahora las necesidades no son las mismas y requerimos crear
algo que sea efectivo para el siglo XXI”. “A partir de ahora, en vez de
estudiar cada asignatura por separado, los alumnos estudiarán eventos y
fenómenos en un formato interdisciplinario y transversal. Por ejemplo, la
Guerra Mundial será examinada desde la perspectiva de la historia, la geografía
y las matemáticas; o para aprender inglés, economía y a comunicarse, los
estudiantes pueden trabajar en una cafetería”.
El miedo a la innovación lleva a “hacer como
otros”. Falta valentía para encarar mejor nuestro destino.
COLUMNA: LEÓN TRAHTEMBERG
Diario Correo.